EL CONTRATO DE EJECUCION DE OBRA (desde el punto de vista del constructor)

Vamos a dar unas breves pinceladas que consideramos necesario,  tenga en consideración como mínimo, un constructor o empresa constructora, en el momento de redactar y firmar un contrato de ejecución de obra.

EL CONTRATO DE EJECUCION DE OBRA es un contrato por el cual el que contratista o constructor se obliga a ejecutar una obra frente al “dueño de la obra o promotor” a cambio de precio cierto ( artículo 1544 Código Civil). Este tipo de contratos no exigen una forma determinada, incluso pueden concertarse verbalmente, no obstante, es importante que queden bien definidos los términos acordados entre ambas partes para evitar problemas en el futuro.

El contrato de ejecución de obras, puede acordarse con o sin suministro de materiales (artículo 1588 Código Civil). Siendo el segundo tipo, el más frecuente.

El contratista ejecutará las obras conforme al proyecto redactado por el Proyectista o la Dirección Facultativa, la legislación aplicable y las instrucciones del dueño de la obra (canalizadas normalmente a través de la Dirección facultativa/Director de la obra, esta última circunstancia es muy importante para evitar problemas en el futuro, sobre todo, en el supuesto de modificaciones del proyecto, cambios de materiales…..). Es muy importante, disponer de la última versión del proyecto y la memoria, y en su caso, documentar y firmar los cambios, para evitar sorpresas en el fututo, que serán fuente de disputas.

Es frecuente establecer como condición esencial en los contratos, el plazo de ejecución de las obras,  el cual, en ocasiones, es muy difícil su cumplimiento (retraso entrega materiales, subcontratas, cambios…) por lo que recomendamos que cualquier retraso no imputable al constructor  (cambios, ampliación obras…..) se comunique de inmediato a la Dirección Facultativa/Propietario de la obra, sobre todo, para evitar la aplicación de las penalizaciones por retraso,  que normalmente se establecen en el contrato. En general, recomendamos se lleve al día la documentación exigida legalmente, actas de obra, libro de órdenes y asistencias, libro subcontrataciones…

En relación al precio, es muy importante establecer detalladamente en el contrato, el procedimiento para la aprobación de las certificaciones de obra , el pago de las mismas, y como solucionar las discrepancias. De igual forma, se recomienda ser muy exhaustivos en la redacción de las actas de recepción de obra y en la confección del listado de repasos y comunicación de la subsanaciones realizadas, ya que en el momento de la liquidación final de la obra, surgen muchos conflictos que provocan la demora en la liquidación y consecuente pago del precio restante, que de no estar bien documentados todos estos puntos, desencadenan muchas veces en procesos judiciales.

Desde Res Radix nuestro equipo de abogados en construcción está listo para asesorarte en todo lo relacionado con la industria de la construcción. Desde disputas contractuales hasta cumplimiento normativo, estamos aquí para proteger tus intereses. Confía en nuestra experiencia y dedicación para obtener soluciones efectivas. Contáctanos hoy mismo.

La importancia de documentar las deudas para poder facilitar el cobro

Desgraciadamente, nos encontramos en unos momentos difíciles donde se están produciendo muchos impagos y los que se producirán en los próximos meses. Por ello, es muy importante, que las deudas estén bien documentadas, mediante facturas, albaranes de entrega, contratos si existen, e.mails….

Explicaremos brevemente, la importancia de ello. Veámoslo

¿Cómo reclamar una deuda correctamente?

Existe un procedimiento judicial, denominado PROCESO MONITORIO, que sirve para poder cobrar de forma ágil y rápida (en la mayoría de los casos) las deudas pendientes de pago. Sin embargo, será necesario que se cumplan  una serie de premisas o requisitos, que a continuación señalamos.

ITER  RECOMENDADO para poder acudir a un PROCESO MONITORIO y RECLAMAR UNA DEUDA:

1º.- REQUISITOS DEUDA PARA PODER RECLAMAR:

Las deudas deberán ser:

  1. Deuda DINERARIA , en moneda de curso legal, nacional o extranjera
  2. Deuda VENCIDA, cuyo plazo de pago ya ha vencido.
  3. Deuda EXIGIBLE, que ya puede reclamarse y no esté sujeta a ninguna condición .
  4.  Deuda DETERMINADA, que sea liquida, es decir, concretada ya en una cantidad de dinero.

Para reclamar una deuda con éxito esta debe ser Dineraria, Vencida, Exigible y Determinada.

2º.- PRUEBA DE LA EXISTENCIA DE LA DEUDA

La deuda deberá acreditarse, de ahí la importancia de documentar las deudas como indicábamos, ya que en caso contrario, el procedimiento no prosperará.

Formas de probar la existencia de la deuda:

  • Mediante documentos, cualquiera que sea su forma y clase o el soporte físico en que se encuentren, que aparezcan firmados por el deudor o podamos acreditar su autoría (por ejemplo, facturas, albaranes de entrega, certificaciones, cartas….)

  • Cualquier otro documento que, sirva para acreditar la relación comercial existente entre acreedor y deudor, el  origen de la deuda, así como la aceptación de la misma por el deudor.

3º.- RECLAMACION  PREVIA A LA VIA JUDICIAL

Si bien no es un requisito para la interposición de un procedimiento monitorio, nosotros siempre recomendamos, antes de la interposición de acciones judiciales,  la reclamación previa de la totalidad de la deuda indicando que se dispone de toda la documentación necesaria para ello.

En ocasiones, el deudor se alarma y valora la necesidad de llegar a un acuerdo de pago, en caso de no hacerlo, tenemos una nueva prueba que acredita la negativa de pago y la necesidad de acudir a la vía judicial.

4º.- INTERPOSICION DEL PROCEDIMIENTO MONITORIO.

Una vez, se disponga de la documentación necesaria para poder reclamar la deuda, se iniciará el procedimiento monitorio mediante una solicitud del acreedor, donde se indique la identidad del deudor, domicilio del acreedor y deudor, y el origen e importe de la deuda, junto con la documentación acreditativa.

Una vez admitida por el Juzgado la petición monitorio, se requerirá al deudor para que , en el plazo de 20 días:

  1. Pague la cantidad reclamada, tras lo cual se archivará el procedimiento
  2. Conteste y se oponga a la reclamación, en todo o en parte, entonces la reclamación se resolverá en el procedimiento correspondiente en función de la cuantía.
  3. No haga nada. En este caso, el Juzgado dictará resolución dando por terminado el proceso monitorio y dará traslado al acreedor para que solicite se ejecute la resolución, y si no paga o se opone, se embargarán bienes, hasta la ejecución de los mismo o el pago.

Tener documentada una deuda es vital para que el pago pueda materializarse, y dificultar al deudor que prospere una posición obstruccionista.